El Rumba ofrece lo que denomina tradición vanguardista, una cocina que conjuga todos los sentidos, reinventado los clásicos. Destacamos, por ejemplo, los langostinos envueltos en patata con salsa de soja y agridulce o el magret de pato con foie fresco, coulis de arándanos y mermelada de naranja amarga.
El local consta de dos salas y una ámplia terraza.